El fútbol es un deporte que
traspasa fronteras y llega a cada rincón del mundo. Mueve a millones de
personas, unidas por la pasión a este deporte y a sus respectivos equipos. Sin
embargo, también mueve millones de euros, dólares o de cualquier moneda que se
trate.
Imagen original aquí |
Debemos destacar que este
deporte, el más famoso del planeta, hace más de 100 años que existe. Concretamente,
comenzó en 1863, cuando en Inglaterra se separaron los caminos del
"rugby-football" (rugby) y del "association football"
(fútbol), fundándose la asociación más antigua del mundo: la "Football
Association" (Asociación de Fútbol de Inglaterra), el primer órgano
gubernativo del deporte (más información aquí).
Llegaron las botas de colores o
las camisetas personalizadas de tu equipo favorito. Con el merchandising las empresas
vieron su oportunidad para conseguir los huevos de oro que daba esta gallina,
en este caso, el fútbol. Las firmas de ropa deportiva de los equipos y
selecciones no solo se encargaban de mejorar las prendas de juego, sobre todo a
la vista del consumidor, sino que también empezaron a comercializar cualquier
prenda de entrenamiento o incluso de paseo.
Las multinacionales no se lo
pensaron y comenzaron a publicitarse en las camisetas de todos los equipos del
mundo firmando contratos millonarios, contratos que también los propios
jugadores firmaban también por “fichar” por una determinada marca (más información aquí). Esto hizo
que comenzara a “quebrarse” la igualdad entre unos equipos y otros debido a que
cuánto más astros tenía un determinado equipo, más dinero generaba y más poder
iba consiguiendo.
Como antes comentaba, el fútbol
llega a todos los rincones del mundo y hasta en los mercados árabes y asiáticos
se percataron del gran éxito de este deporte y empezaron a invertir en él. Ya
existen clubes muy importantes que tienen por nombre de su estadio a su patrocinador,
como por ejemplo el Manchester City, Arsenal o Bayern de Múnich y que en
próximos años se espera que otros equipos se sumen, como por ejemplo el
Atlético De Madrid, cuyo estadio se llama Wanda Metropolitano, siendo Wanda uno
de los grandes activos del club y que posee una gran cantidad de acciones del
mismo.
Por último, el fútbol recibe
millones por los canales de televisón para poder emitir los partidos en
primicia de modo que quien más ofrezca, podrá emitir estos partidos y lograr a
su vez un negocio seguro. Compañías como Movistar facturan millones de euros
por ofrecer a sus clientes competiciones de fútbol tan importantes a nivel
mundial como la Champions League. Además de todo esto, el fútbol es noticia día
a día en todos los informativos de cualquier emisora, ya que la sección de
deportes de las mismas está dedicada casi por completo a este deporte.
Audiencia del fútbol en España (original aquí) |
Hace años el Real Madrid fichaba
a Cristiano Ronaldo por aproximadamente 96 millones de euros. Todo este dinero
gracias a los ingresos obtenidos por el club merengue. Como último ejemplo está
el brasileño Neymar. Con un costo de 222 millones de euros se convirtió el año
pasado en el jugador más caro en la historia del fútbol. Fichado por el Paris
Saint Germain, club que tiene como dueños a un grupo de jeques árabes (más datos sobre fichajes aquí).
El fútbol moderno implica
fichajes por encima de los 70 millones de euros, cosa que a mucha gente no le
agrada. En algún momento existían jugadores con amor al club donde se
desempeñaban, durando años en la institución e incluso permaneciendo una vida
entera en el mismo.
Actualmente no es así. La mayor
parte de los jugadores buscan migrar a otro lugar en función de la suma de dinero que le ofrezcan. El fútbol ya es manejado por el dinero. Los distintos intereses de
los grandes dueños en la industria pueden más que el mismo interés del equipo y que la pasión y competitividad característica en el deporte.
Hoy en día el fútbol más que un
deporte, se ha convertido en un gran negocio que mueve cifras estratosféricas.
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